El ataque mortal a la Congregación Hebrea de Heaton Park (en Inglaterra) de esta semana, se suma a una cadena dolorosa de atentados en contra de comunidades judías en todo el mundo, y donde cada vez que se relativiza o se minimiza este odio, se prepara el terreno para que un hecho criminal de esta naturaleza vuelva a repetirse.
Por Alfredo Misraji Trajtman
Publicado el 3.10.2025
El brutal ataque ocurrido en Manchester contra una sinagoga en pleno Iom Kipur, que dejó muertos y heridos, no puede entenderse sino como lo que es: antisemitismo.
No hay excusas, no hay contextos, no hay justificaciones. Quienes entraron a matar en el día más sagrado de nuestro calendario no atacaron a un gobierno ni a una política: atacaron a judíos por ser judíos.
Durante demasiado tiempo hemos escuchado la falacia de que «no es antisemitismo, es anti sionismo». Los hechos demuestran lo contrario. Los que odian a Israel lo odian porque es el Estado judío. Es la misma matriz de odio que se disfraza con otros nombres, pero que siempre tiene las mismas víctimas.
Esto fue antisemitism
Manchester no es un hecho aislado.
Con todo, este ataque, se suma a una cadena dolorosa de atentados contra comunidades judías en todo el mundo. Cada vez que se relativiza o se minimiza este odio, se prepara el terreno para que vuelva a repetirse. Y la historia nos ha enseñado, con demasiada sangre, a no callar, porque el antisemitismo mata.
Manchester nos duele. Nos duele como judíos, nos duele como comunidad global, nos duele como seres humanos.
Pero más allá del dolor, reafirmamos nuestra determinación: no cederemos al terror, no aceptaremos silencios cómplices, no permitiremos que se esconda la verdad.
Esto fue antisemitismo. Y el mundo tiene la obligación moral de enfrentarlo con toda su fuerza.
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Alfredo Misraji Trajtman es un médico chileno, especializado en pediatría y microbiología.el presidente de la Comunidad Judía de Chile.
Alfredo Misraji
Imagen destacada: Congregación Hebrea de Heaton Park (Manchester, Inglaterra).