La reciente edición de Cátedra de estas dos novelas de John Buchan cuenta con la nueva traducción de Eduardo Valls Oyarzun quien realiza, además, un completo análisis del trabajo del autor británico, al incluir una interesantísima comparativa entre la primera de las obras y la célebre adaptación cinematográfica que hizo de esta Alfred Hitchcock en 1935.
Por Eduardo Suárez Fernández-Miranda
Publicado el 10.8.2025
En 1935, dentro todavía de su etapa británica, el extraordinario cineasta Alfred Hitchcock llevó a la gran pantalla la adaptación de Los 39 escalones, del novelista John Buchan. Entre los principales intérpretes se encontraban Madeleine Carroll, Robert Donat, Lucie Manheim o Godfrey Tearle.
Aunque inspirada en la novela de John Buchan, el director de Con la muerte en los talones, contó con la inestimable ayuda de Alma Reville y Charles Bennett como guionistas para darle un nuevo enfoque a la novela de espías.
Hitchcock recurre al personaje que es considerado culpable sin serlo. Perseguido por Scotland Yard, no sólo se verá obligado a huir de la policía, sino que también deberá desenmascarar a los espías para demostrar su inocencia.
Desde Londres hasta Escocia, el personaje principal recorrerá un camino frenético que le llevará a demostrar su inocencia. Este largometraje sentaría las bases de películas posteriores en su filmografía como Cortina rasgada o El hombre que sabía demasiado.
Con posterioridad, Ralph Thomas, en 1960 y Don Sharp en 1979 realizaron sendas versiones.
Las tensiones entre barbarie y civilización
Ahora tenemos la oportunidad de leer la novela en la que se basaron estos cineastas gracias a la labor editorial de Cátedra. Además, la editorial madrileña —perteneciente al grupo Anaya— ha tenido el acierto de incluir la secuela de Los 39 escalones que lleva por título: Mantoverde.
Su autor, John Buchan (Perth, 1875 – Montreal, 1940) político y escritor, desarrolló una importante carrera diplomática que le llevó a ser nombrado Gobernador General de Canadá. Como escritor fue el creador de la novela de espías y el thriller político, antes de la Primera Guerra Mundial, una especialidad típicamente inglesa.
Luego, llegaría Eric Ambler. Ambos serían la inspiración para autores como John Le Carré, Graham Greene o Ian Fleming.
Con todo, Los 39 escalones y Mantoverde inauguran: «los motivos fundamentales de gran parte de la narrativa de espías hasta nuestros días». Es decir: «Las tensiones entre barbarie y civilización —especialmente en el contexto geopolítico internacional—, el manejo de la información secreta, la concepción del espionaje como tarea antiheroica o el empleo de la tecnología para territorializar el espacio».
Esta reciente edición cuenta con la nueva traducción de Eduardo Valls Oyarzún quien realiza, además, un completo análisis del trabajo de John Buchan, incluyendo una interesantísima comparativa entre Los 39 escalones y la célebre adaptación de Alfred Hitchcock.
Una gran oportunidad de introducirnos en los orígenes de la novela de espías, cuyos herederos todavía campan en nuestras librerías.
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Eduardo Suárez Fernández-Miranda nació en Gijón (España). Licenciado en derecho por la Universidad de Sevilla, realiza sus estudios de doctorado dentro del Departamento de Literatura Española e Hispanoamericana de la misma Casa de Estudios superiores.
Colabora como crítico literario en las revistas españolas El Ciervo, Serra d’Or, Llegir.cat, Gràffica y Quimera, donde lleva a cabo una serie de entrevistas a escritores, editores y traductores, nacionales y extranjeros.
Asimismo, escribe para las publicaciones americanas Cine y Literatura (Chile), La Tempestad (México), Continuidad de los Libros (Argentina) y Latin American Literature Today (University of Oklahoma). También, colabora de forma ocasional en los diarios asturianos El Comercio y La Nueva España.

«Los 39 escalones. Mantoverde», de John Buchan (Ediciones Cátedra, 2025)

Eduardo Suárez Fernández-Miranda
Imagen destacada: John Buchan.