«Los fuertes», de Omar Zúñiga: Secreto en la montaña a la chilena

Protagonizado por los actores Samuel González y Antonio Altamirano, este filme nacional —el cual se acaba de estrenar en la cartelera local—, ofrece a través de su plástica y de su estética audiovisual, claras referencias artísticas con la celebrada cinta del realizador taiwanés Ang Lee.

Por Carla Recabal Ramírez

Publicado el 19.3.2020

En estos tiempos, cuando vemos por la calle a una pareja homosexual tomada de la mano, ya no se percibe el aura prohibitiva que antes acompañaba a este tema. Y si bien desde hace años el mundo cinematográfico ha tratado de trasmitir el mensaje sobre el reconocimiento del mundo LGBTIQ+, y sus derechos, este no lograría cimentarse hasta después del año 2000. No obstante, en territorio nacional al menos, aún queda mucho por hacer.

En Los fuertes, su director y guionista Omar Zúñiga, toma esta consigna de forma muy íntima. Su ópera prima, estrenada el jueves 12 de marzo, pone a la palestra el amor entre personas del mismo sexo, y lo hace sin tapujos…

La historia nos lleva hacia el mundo introspectivo de Lucas (Samuel González) quien, abatido por la reacción de sus padres al confesarles su homosexualidad, va a visitar a su hermana Catalina (Marcela Salinas) a un remoto pueblo en el sur. Allí se encuentra con que ella tiene sus propios problemas en un matrimonio ad portas de una crisis, y con Antonio (Antonio Altamirano), un contramaestre marino que, un día cualquiera, lleva leña a la casa.

Es en esta situación donde se produce la conexión propia de dos personas que se gustan, y que, al igual que en Secreto en la montaña (Ang Lee, 2005), se hace en silencio y sin tanto descaro, después de todo, todavía parece ser que existe un halo de tabú para ambas partes. Uno por el hecho de que está recientemente aceptando y exponiendo su sexualidad (Lucas) y el otro porque el pueblo, aún muy conservador, más sus propias heridas familiares, lo han hecho ser reservado, pero no por eso menos atrevido (Antonio). Es así como el director entrepone la contemplación como medio para tejer el romance.

Sin embargo, basta un encuentro para que ambos tomen riendas en el asunto y confiesen, a través de un beso, que están locos el uno por el otro. Es aquí donde arranca verdaderamente la trama. La cámara, al hacer cómplice al espectador de importantes perspectivas que para el resto de los personajes permanecen ocultas, se transforma en un recurso ventajoso que logra ahuyentar la sensación tediosa generada al principio del relato.

Ahora los acontecimientos, calmosos pero intensos, van ocurriendo acorde a lo que se espera en una típica película de amor, con la gran interrogante del ¿se quedarán juntos?, y con el despecho como gran enemigo e impulsor de estos.

A destacar, los paisajes que hacen alarde del hermoso y acogedor sur de Chile, los cuales, aludiendo nuevamente como referencia al filme dirigido por Ang Lee, sirven de contraposición para resaltar la intensidad pasional/romántica, en medio de lo rústico y silencioso. Condiciones que grafican el efecto de que las palabras sobran, y de que, si se abusa de esto mismo, se puede llegar a un resultado incómodo, como la lluvia y el mar por ejemplo, elementos a destacar en la narración.

Luego de un clímax que culmina en una escena digna de una novela de Sade o Khaló Alí. Nos acercamos al final, algo predecible pero no menos meritorio. El sentido del nombre del filme se hace evidente. Lucas y Antonio demuestran que son fuertes, cada uno con lo suyo, con sus sentimientos y sus vidas, las cuales deben continuar, a pesar de que estas no impliquen al otro. Seguir como dos almas que compartirán un secreto, el de haberse amado tan loca y apasionadamente, esta vez eso si, no en una árida montaña de Estados Unidos, sino en medio del verde bosque sureño de Chile, al son de una nostálgica canción de Gepe.

 

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Carla Recabal Ramírez (nombre real de Carla Oriely) nació en Santiago de Chile en 1993. Es comunicadora audiovisual por la Universidad de los Andes y actualmente se dedica a la producción teatral y al apoyo docente en materias de análisis fílmico y de guión.

 

Carla Recabal

 

 

 

 

Tráiler:

 

 

Imagen destacada: Los fuertes (2019), de Omar Zúñiga Hidalgo.