«On earth we’re briefly gorgeous», de Ocean Vuong: El enamoramiento del desgarro

Esta novela es una improbable carta, y es, asimismo, una narración que debe leerse con atención, pues en ella los temas más urgentes, como los derechos de los inmigrantes, los prejuicios raciales y sexuales, la pobreza de los rezagados en el país más rico del mundo (los Estados Unidos), coexisten en una terrible huerta.

Por Nicolás Poblete Pardo

Publicado el 30.7.2019

On earth we’re briefly gorgeous es la primera novela del joven poeta nacido en Vietnam y residente de los Estados Unidos. Ocean Vuong (1988) es conocido por su rápido ascenso en los círculos literarios, gracias a sus poemas que han aparecido en diversas revistas y a su notable colección “Night Sky with Exit Wounds”, ganadora del Whiting Award y del T. S. Eliot Prize.

On earth we’re briefly gorgeous (En la tierra somos brevemente espectaculares) es, según dice su categoría, una novela, pero esta obra está más cerca del género “memoir”. Algo tienen que decir los editores respecto a esta tendencia de estirar las denominaciones (¿para conseguir más ventas?). Sin embargo, realmente no importa el modo en que se intente “vender” esta obra: su propuesta es de una potencia que no amerita catalogarla. Sin duda es su peso poético lo que hace del escrito un libro notable. La historia, que es la de un niño-adolescente relatando su vida como inmigrante, como víctima de bullying, podría ser –es– la de muchos. Su relato sobre sus encuentros sexuales, sus enamoramientos; sus observaciones respecto al capitalismo americano, a las clases sociales y al racismo tampoco son per se novedosas. Pero el ojo que pone Vuong en cada descripción confiere a estas percepciones de un halo único, bello, tierno, emocionante, hasta desgarrador.

Quizá parte de este desgarro proviene del recurso que Vuong privilegia: la carta. La novela es una larga carta escrita a su madre, a modo de homenaje, de agradecimiento. Pero hay algo muy triste, a la vez que irónico, en este regalo a la madre. Ella no podrá leerlo, ya que no habla ni lee inglés. En ese sentido On earth es un peculiar escrito que se potencia precisamente por la imposibilidad de transmitir su mensaje a la persona a la que va dirigido. En una de las escenas más exaltadas de la novela, vemos al joven describiendo muy gráficamente su encuentro sexual con su gran, primer amor. En su fogosidad, confiesa: “Solo tengo el valor para contarte lo que viene porque las chances de que esta carta te encuentre son pocas—la misma imposibilidad de que leas esto es lo que hace mi relato posible”.

On earth… está atravesado por referencias literarias (como especifica en sus agradecimientos). El hijo relee, por ejemplo, a Roland Barthes, su Diario de duelo, donde se reconoce: “He conocido el cuerpo de mi madre, enfermo y luego muriendo”. El cuerpo de la madre juega un gran rol en esta novela, pues el hijo se siente adherido a ella, a través de la imagen de la bala: Es una bala que siempre ha estado allí; sus huesos, tendones y venas se han amoldado en torno al metal, sellándolo: “No era yo… quien estaba dentro del útero de mi madre, sino esta bala, esta semilla alrededor de la cual florecí”. Luego extiende esta metáfora: “Porque una bala sin cuerpo es una canción sin oídos”.

La extrema sensibilidad del hijo (llamado “Little dog”, “perrito”, como una marca cultural supersticiosa que busca desprestigiar a ese ser y, de esta manera, protegerlo de posibles males, desmotivando a potenciales fuerzas malignas que podrían acercarse en busca de su cuerpo) le hace percibir su entorno en un permanente estado de híper-sensibilidad. Él quiere pedir perdón incluso a gente a quien no le ha hecho nada; quiere pedir perdón a sus compañeros de trabajos temporeros; a los inmigrantes, refugiados ilegales mexicanos. “Lo siento”, dice, “porque soy tu hijo; mis disculpas”, dice, “son una extensión de mí mismo”, al nivel que: “Lo siento”, es su manera de decir: “Hola”.

Esta novela es una improbable carta, y es, asimismo, una narración que debe leerse con atención, pues en ella los temas más urgentes, como los derechos de los inmigrantes, los prejuicios raciales y sexuales, la pobreza de los rezagados en el país más rico del mundo, coexisten en una terrible huerta. Ahí tenemos, por ejemplo, el “personaje” de la abuela, “Lan”, traumatizada hasta la esquizofrenia por su bagaje como sobreviviente en la guerra de Vietnam. Ese retrato (uno de muchos), contrastado con el fondo americano, resulta doloroso. Pero es al final de la novela cuando el título se hace evidente. Considerando la volatilidad de la vida, su transitoriedad, “ser espectaculares, incluso desde el día en que naces hasta el que mueres, es ser espectacular solo brevemente”. Al final de ese párrafo, considera: “Para ser espectaculares, primero debes ser visto, pero ser visto hace posible que te cacen”. Un poco antes, la voz narrativa ha hecho referencia a la masacre del 2016, cuando Omar Mateen mató a 49 personas en un club gay en Orlando.

Es de esperar que la traducción al español se haga prontamente, pues la primera novela de Ocean Vuong es, a mi juicio, una de las publicaciones más destacadas del último tiempo.

 

Nicolás Poblete Pardo (Santiago, 1971) es escritor, periodista y PhD en literatura hispanoamericana por la Washington University in St. Louis, Estados Unidos. En la actualidad ejerce como profesor titular de la Universidad Chileno-Británica de Cultura y académico de la Universidad Andrés Bello, y su última novela publicada es Sinestesia (Editorial Cuarto Propio, Santiago, 2019).

Asimismo, es redactor permanente del Diario Cine y Literatura.

 

On earth we’re briefly gorgeous», de Ocean Vuong (Estados Unidos, 2019)

 

 

Nicolás Poblete Pardo

 

 

Imagen destacada: Fotomontaje de la portada de la novela On earth we’re briefly gorgeous, y el rostro del novelista Ocean Vuong.