[Crítica] «La biblioteca de París»: La trascendencia de las palabras

Con una prosa oxigenante, la novela de época de la narradora estadounidense Janet Skeslien Charles —ambientada en el contexto de la ocupación nazi de la capital francesa durante la Segunda Guerra Mundial— es un relato envolvente y conmovedor, pues a todos aquellos a quienes les gusten el mundo de los libros y las conexiones entre ellos, encontrará más de una sorpresa en este nuevo título de la Editorial Salamandra.

Por Martín Parra Olave

Publicado el 5.10.2021

La reivindicación del valor del libro parece ser una constante en la historia de los seres humanos. No es algo exclusivo de un momento histórico, sino que por el contrario parece que cada ciertos años cobra relevancia.

Por ejemplo, en los actuales tiempos de pandemia se ha dicho mucho acerca de su importancia como soporte psicológico y compañía durante el encierro, una forma incluso de libertad para quienes realmente han debido permanecer entre las cuatro paredes.

En este sentido, la novela La biblioteca de parís (Salamandra, 2021) es una suerte de oda a la libertad y a la capacidad ilimitada del libro de formar paréntesis en la mente de las personas, mientras su exterior está siendo absolutamente derrumbado.

La invasión nazi de la ciudad de París en 1939 fue un verdadero desastre para todos aquellos que vivían en esa urbe durante esos años. El totalitarismo se cernía sobre toda Europa y no quedaban espacios para pensar distinto o ser de otra raza que no fuera la aria.

Y la muerte era la condena para todos los que fueran diferentes.

 

El amor por la libertad

Janet Skeslien Charles (Conrad, 1971), es escritora, profesora y bibliotecaria, cuya última novela está basada en la labor que realizaron los trabajadores estadounidenses en la biblioteca americana que se encontraba en parís, en el momento en que ocurre la invasión de las fuerzas opresoras de Hitler.

A través de la historia de Odile Souchet, y de su amiga Margaret, nos internaremos en una aventura donde la fuerza y el amor por la libertad y los libros logran superar la opresión militar. La valentía de estas dos mujeres permitió que la biblioteca se mantuviera funcionando, dando así un valor extraordinario a las posibilidades de leer.

Dos mundos que se enfrentan. Por un lado, se encuentran los libros como sinónimos de crecimiento, imaginación, tolerancia, libertad y por supuesto, sueños y vidas ajenas. Además, la biblioteca se va a convertir en un espacio donde la comunidad puede encontrarse brevemente, es el lugar heterotópico donde las personas pueden hacer un paréntesis a la triste realidad que están viviendo por aquellos años.

Este lugar choca, solo con el poder de las palabras, a la fuerza militar. El totalitarismo se opone a la libertad y a la libre circulación de las palabras; la intenta doblegar, pero no puede, pues son más poderosas y trascendentes que las mismas armas.

Con una prosa oxigenante, La biblioteca de París es un relato envolvente y conmovedor. A todos aquellos que les guste el mundo de los libros y las conexiones entre ellos, encontrará más de una sorpresa en este volumen.

Un tema que no pasa de moda y que la escritora americana ha sabido revitalizar, a través de un relato inmerso en uno de los hechos más doloroso de la humanidad.

 

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Martín Parra Olave es licenciado en gobierno y gestión pública de la Universidad de Chile y magíster en letras de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Actualmente cursa el doctorado en literatura impartido por la última Casa de Estudios.

 

Janet Skeslien Charles

 

 

Martín Parra Olave

 

 

Imagen destacada: Editorial Salamandra.