[Ensayo] Los Larraín Matte, Evópoli y el liberalismo represor

El objetivo de la derecha progresista es evitar la llegada del Partido Comunista al gobierno, tal como lo sostuvo en 1948 cuando se redactó la Ley de Defensa Permanente de la Democracia. En la actualidad, elementos muy influyentes de aquel sector, como lo es el cineasta Pablo Larraín Matte (en la imagen destacada junto a su hermano y productor audiovisual, Juan de Dios) ya han tendido puentes hacia la candidatura de Gabriel Boric, a fin de asegurar que en un futuro régimen de Apruebo Dignidad se aplique la Ley de Seguridad del Estado para oprimir y controlar a los ciudadanos disidentes.

Por Patricio Altamirano Arancibia

Publicado el 14.12.2021

Cuando Bernardo Larraín Matte (BLM) opina, habla, escribe, se expresa la memoria histórica del clan Larraín que ha construido la sociedad chilena desde sus inicios, hasta nuestros días.

Como clan saben de la historia política de Chile, pues la han forjado. Han impuesto una Dictadura Colonizadora Extranjerizante permanente, que ha realizado siete ciclos golpistas; y que se encuentra embarcado en un octavo ciclo, que es el más difícil y donde pueden ser derrotados.

Para comprender la memoria histórica del clan Larraín, veamos cómo se inicia con la dictadura invasora del Reino de España:

 

El ancestro de Bernardo Larraín Matte en Aranaz, País Vasco, en 1540 fue Joanes Larraín, que con 40 años había adquirido poder para constituir la Casa Larraín; simultáneamente el ejército del reino de Castilla invade lo que será América Latina y expulsan de sus tierras a los pueblos originarios y los someten, con lo cual gestan tierras que pueden adquirir los segmentos económicos que acumulan poder económico en España.

Los herederos de Joanes Larraín, que dominan el pueblo de Aranaz, logran emigrar a Chile mediante su poder económico. El primero de ellos fue Santiago Larraín Vicuña que, en base al poder económico gestado en España puede acumular riqueza en el reino de Chile. Sus herederos estarán involucrados con los ciclos golpistas desde 1810 hasta 2021 y buscarán retener el poder económico y político en las castas europeas medievales.

 

 

En estos ciclos políticos el clan Larraín buscó eliminar todo tipo de liberalismo democratizador o ilustrado que igualara los derechos de los mestizos e indígenas y que impidiera que estos llegasen a tener propuestas políticas autónomas, para así perpetuar el poder de los clanes medievales europeos y sus descendientes.

Veamos los siete ciclos que han realizado:

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Cuando Bernardo Larraín Matte (BLM) habla de política, es desde la experiencia de una dinastía que lleva siete ciclos políticos golpistas, que mediante dictaduras han recuperado el poder, y asesinando a quienes han osado disputarles la conducción política del país.

Recordemos que Bernardo Larraín Matte, en el contexto del acuerdo por la paz y la nueva constitución, del 15 de noviembre de 2019, cuyo objetivo para la clase dominante fue salvar al gobierno de Piñera y salvar a todo el sistema de dominación, estuvo de acuerdo con ese pacto, y además se pronunció públicamente como partidario del apruebo.

La sabiduría ancestral del clan Larraín se expresa en que está por el cambio constitucional, están por el apruebo para mantener “casi” lo mismo y hacer reformas “muy superficiales”, sobre todo asumiendo los cambios culturales feministas y ecologistas sin afectar la reproducción de los clanes chilenos.

Como Bernardo Larraín Matte explicitó su opción por el apruebo, esto lleva a La Tercera a entrevistarlo el día 28 noviembre de 2021, sobre la segunda vuelta presidencial.

La Tercera esperaba una respuesta clara, sin embargo, Bernardo dijo “el voto es secreto” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28) en el plebiscito del Apruebo y del Rechazo también, pero ahora se acordó: “Yo, como soy un ciudadano de a pie” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28) refiriéndose a que: “no represento ninguna institución, voy a mantener esta condición” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28), porque ahora no es dirigente empresarial.

Bernardo representa a un clan que ha votado desde los tiempos medievales. En Aranaz fueron elegidos alcaldes por ser propietarios, cuando el voto era censitario y solo la clase alta votaba, luego en Chile han votado hasta nuestros días; a diferencia de las clases bajas cuyo voto es muy recientemente. En la entrevista, Bernardo se negó a reconocer si votará por Kast y claramente deslegitimó a Boric.

El periodista le saca trote a esa aparente neutralidad de Bernardo ante Kast y Boric, indicando que: “percibo que prefiere un triunfo de Kast al de Boric” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28), esto en razón a lo que expresa de ambos.

Destaca y aplaude que: “la primera mayoría de la elección presidencial (Kast) fue quien más nítidamente se pronunció contra estos dos flagelos” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28) que para él son “la violencia y el populismo” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28). Claramente Kast no busca reducir la desigualdad económica, sino que, muy por el contrario, aumentar el poder de las castas dominantes y reprimir a los disidentes.

Bernardo sostiene que Boric perdió la primera vuelta porque fue populista, quiso reducir la desigualdad y usó una “multiplicidad de iniciativas legislativas, como los retiros fondos de pensiones, que se hacían sin respetar la iniciativa del Ejecutivo” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28), y más encima en lugar de condenar la violencia, cuestionó mediante las “acusaciones constitucionales, tergiversando el espíritu de fondo de esta herramienta” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28) al Presidente Piñera.

A juicio de Bernardo eso explicaría: “que el diputado Boric haya alcanzado solo la votación de la primaria de Apruebo Dignidad y que la senadora Provoste haya salido quinta, también es una demostración de aquello” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28), porque Boric y Provoste, a juicio de Bernardo: “han sido grandes promotores de los retiros de los fondos de pensiones, de la ley de indulto a los que ellos llaman los presos de la revuelta” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28).

Embiste contra Boric porque a su juicio valida: “la violencia como un método de acción política: el proyecto de indulto es una demostración demasiado palpable de esa validación” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28). Claramente Bernardo no está plenamente con Boric, aunque si está con el Boric que firmó el acuerdo del 15 de noviembre de 2019.

Bernardo, producto de la presión del periodista, informa que meditará su decisión, se tomará su tiempo, buscará entre Kast y Boric, o quien logre hacer: “evolucionar a su coalición hacia un cierto camino reformista” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28), lo precisa acotando: “un reformismo gradual” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28).

Recalca que votará por quien mueva: “el debate público hacia el largo plazo, hacia un reformismo innovador y hacia una mirada liberal que busca integrar o equilibrar libertad con equidad” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28). Que se aleje del “camino refundacional que representa la coalición Apruebo Dignidad” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28) y del “inmovilismo que algunos podrían leer del proyecto político de José Antonio Kast” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28).

Muy importante: Bernardo constata la polarización que hay en los programas de primera vuelta, y dice: “nunca hemos visto que el candidato A proponga ocho puntos del PIB de aumento tributario y el candidato B proponga exactamente lo mismo, en el sentido contrario” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28).

Recordemos que el clan ha visto y participado desde 1540 hasta nuestros días en muchas elecciones, como clan más que cualquier “ciudadano de a pie” de este país.

Bernardo se asombra de: “que el candidato A proponga decenas de organizaciones, instituciones y agencias del Estado y el candidato B, reducción a casi la mitad del número de ministerios, incluido el Ministerio de la Mujer” (BLM, La Tercera, 2020, 11, 28).

Esto para él es inédito, es una muestra de que esta crisis de dominación política que sufre el clan es más intensa que los siete procesos golpistas anteriores, la acción de la casta Larraín será lo más refinada posible.

Bernardo quiere un reformismo gradual como gobierno, muestra favoritismo por Kast, aunque no fue su candidato predilecto, y plantea críticas y se ve muy lejano de Boric.

Sin embargo, sus actos de financiamiento en las campañas electorales anteriores, y en ésta que todavía no sale a la luz pública, nos indican qué partido, o qué partidos son capaces para él de implementar el reformismo gradual que postula Bernardo.

 

El empresario Bernardo Larraín Matte

 

Las «inversiones» de una casta que se resiste a perder

Ahora indaguemos a quienes financiaron los Larraín en la elección de Constituyentes, Gobernadores, Alcaldes y Concejales, a quienes aportaron sus tres generaciones, y también sus dos ramas familiares principales:

Jorge Bernardo Larraín Matte ($59 millones) hijo de María Patricia Matte Larraín ($17 millones).

Hernán Larraín Matte ($30 millones), Magdalena Larraín Matte ($4 millones), María José Larraín Matte ($3,8 millones) y su esposo Fernando Andrés Sarabia Barrie ($1,2 millones), estos Larraín mencionados son hijos de Magdalena Matte Lecaros ($4,3 millones).

Jorge Matte Capdevila ($1 millón), María del Pilar Matte Capdevila ($12 millones) hijos de Eliodoro Matte Larraín ($16,8 millones); Bernardo Matte Izquierdo ($10 millones) hijo de Bernardo Matte Larraín.

Los candidatos de Evópoli fueron los que recibieron el mayor aporte de los Larraín, sobre todo por el financiamiento entregado a Hernán Larraín Matte, que salió electo constituyente, y quien fuera presidente de Evópoli. Le siguieron en importancia los aportes a candidatos UDI y RN, también hubo aportes a PDC, PPD, Ciudadanos, Independientes no Neutrales e Independientes con Chile.

Con esto se puede entender que el reformismo gradual que busca Bernardo Larraín Matte está expresado en la propuesta de gobierno de partidos como Evópoli, Renovación Nacional y la Unión Demócrata Independiente.

Su opción partidaria se aclara cuando se revisan los financiamientos en la primaria presidencial.

Bernardo Larraín Matte (10 millones), su esposa Bernardita de Lourdes Cosmelli Munita ($2 millones), junto a Colomba Bezanilla Cosmelli ($1 millón) aportan en total $13 millones a la candidatura del precandidato presidencial de Evópoli, Ignacio Briones Rojas, y no aportaron a ninguna otra candidatura.

Se puede entender que el reformismo gradual está expresado con mayor claridad en la propuesta de gobierno de Evópoli.

Transparentemos que Nicolás Ibáñez Scott también aporta 14,5 millones al candidato de Evópoli, sin embargo, él se ubica a la derecha de este partido, y lo apoya. Esta aparente contradicción la dilucidaremos en algunas páginas más de este texto, y por ahora solo lo dejaremos planteado.

Además, la familia Ibáñez Scott no financió a ningún otro precandidato de la derecha. Ibáñez entonces conjuga la propuesta de Briones-Evópoli junto al discurso de ultraderecha cercano a Republicanos.

De hecho, financió al intelectual de derecha Axel Kaiser Barents-Von Hohenhagen, quien es parte de una familia que profesa un extremismo muy publicitado, como por ejemplo, su hermano Johannes Kaiser que fue electo diputado y que, por sus posturas ultra, se ubica a la derecha de Republicanos; su hermana Vanessa Kaiser, que es concejala por Republicanos y, por último, Leif Kaiser que es líder de la Asociación del Rifle.

 

Los Cosmelli y el general René Schneider

Evópoli en las primarias presidenciales fue apoyado por el tronco histórico de las castas familiares dominantes, como son los Larraín Matte Cosmelli junto a Ibáñez, una derecha liberal junto a la ultraderecha, esto se puede aclarar fácilmente.

Recordemos que Bernardo Larraín Matte está casado con Bernardita de Lourdes Cosmelli Munita, y ella es hija de León Cosmelli Pereira.

Para aclararnos completamente volvamos al 25 de octubre del año 1970. El general René Schneider sufre un atentado de un grupo de jóvenes de extrema derecha que atacan su auto, este intentó repeler la agresión disparando, pero fue herido, y luego falleció.

Uno de esos jóvenes fue León Cosmelli Pereira, que en esa época estudiaba en la universidad, quien fue detenido por su participación en el asesinato del general Schneider. Basta recordar que ese acto criminal fue perpetrado por lo más granado de la ultraderecha chilena.

En conclusión, Bernardo Larraín Matte, ni más ni menos, está casado con la ultraderecha chilena, representada en la familia Cosmelli Pereira, confirmando la tendencia histórica que viene de la dictadura colonizadora extranjerizante, y los siete ciclos golpistas, donde es natural que se asesine a los disidentes y que miembros de la clase alta participen de ello.

Esta naturalizada práctica de eliminar oponentes políticos usando el ejército chileno, que deviene del ejército conquistador castellano, o a manos de los propios jóvenes de ultraderecha como León Cosmelli Pereira, está presente en Evópoli que entrelaza ideas liberales y represivas, las cuales representaba su exprecandidato Briones.

Lo anterior queda totalmente expresado en el único intendente electo de derecha, que fue Luciano Rivas, en la Araucanía, quien postuló por un cupo de Evópoli.

Esta “victoria” fue celebrada y difundida por Evópoli, y su gestión muestra cómo se expresa el “reformismo gradualista” de Bernardo Larraín Matte, que combina liberalismo y represión.

Esta victoria electoral de Evópoli en la gobernación de la Araucanía es ejemplificadora del tipo de democracia restringida a la cual aspira Bernardo Larraín Matte.

En la segunda vuelta presidencial del año 2017 la participación electoral llegó a 49%, en el plebiscito constitucional del año 2020 bajó a 40%, en la elección de primera vuelta de gobernadores del año 2021 bajó aún más, a 38%; y en la segunda vuelta de gobernadores bajó todavía más, llegando a 15%.

En la Araucanía se mantuvo la votación de las clases altas y sus sectores medios gestores, en cambio bajó la participación de los sectores populares.

El gobernador Luciano Rivas ganó porque se unieron los votantes de Evópoli, de Chile Vamos y de la ultraderecha de la Araucanía, que además es la misma base electoral que llevó al senado a Felipe Kast a salir electo, quien además es sobrino de José Antonio Kast.

Recordemos que el reformismo gradual que plantea Bernardo lleva a Evópoli a dejar en libertad de acción frente al apruebo-rechazo del cambio constitucional y, en ese contexto, Felipe Kast publicita que votará apruebo y luego, junto a Evópoli, fueron los más interesados en decretar el estado de emergencia en las provincias de Cautín, Malleco, Biobío y Arauco para volver a “pacificar” la Araucanía, lugar histórico de la resistencia ancestral frente a los invasores, que en sus inicios fueron las castas medievales europeas, y ahora continúan sus herederos.

Evópoli sintetiza el más allá del apruebo y del rechazo junto a un Estado de Emergencia represivo, ya que la actual legislación lo permite, es solo utilizarla. Esto tiene el respaldo completo de la clase alta y de sus capas medias gestoras, y algunos segmentos de capas medias independientes, es una amplitud que abarca la derecha completa y una fracción del centro político, una transversalidad.

Esta transversalidad de Evópoli se representa tanto en Felipe Kast como en Luciano Cruz-Coke, ambos líderes de Evópoli. Familiarmente ligan posiciones de ultraderecha, derecha liberal y el centro político.

 

La plana mayor y fundadora de Evópoli: Luciano Cruz-Coke, Felipe Kast y Hernán Larraín Matte

 

La ultraderecha en los orígenes familiares de Evópoli

En el caso de Felipe Kast su madre se casó, luego de la muerte de su padre Miguel Kast, con Javier Etcheberry Celhay, quien es parte de la elite de la antigua Concertación y uno de sus exministros. En el caso de Luciano Cruz-Coke está casado con Javiera García-Huidobro Aninat, hija de Isabel Aninat Ureta, hermana del exministro Eduardo Aninat Ureta de la Concertación.

Esto hace de Evópoli un espacio político de la transversalidad política de toda la derecha y una fracción del centro político.

Felipe Kast es a Miguel Kast Rist, como Luciano Cruz-Coke es a su padre Carlos Cruz-Coke Ossa. Kast y Cruz-Coke son herederos de la más recalcitrante ultraderecha chilena, y ambos fueron reconocidos pinochetistas.

Cruz-Coke Ossa inclusive fue militante y uno de los fundadores de Avanzada Nacional, el brazo político de la CNI durante la década de 1980. Miguel Kast Rist, en tanto, fue formado en la ideología nazi por su padre alemán, y luego fue gremialista junto con Jaime Guzmán en la Pontificia Universidad Católica de Chile.

Carlos Cruz-Coke Ossa provenía de una familia proclive al Partido Conservador, luego, y según ya se ha dicho integró el partido Avanzada Nacional, de ultraderecha, y el cual tenía como un destacado integrante a Álvaro Corbalán (agente de la CNI, y actualmente privado de libertad por crímenes de lesa humanidad).

Esta transversalidad de Evópoli permite combinar liberalismo y represión sin ningún problema, es lo que representa Hernán Larraín Matte, el único constituyente de los Larraines.

Su padre, Hernán Larraín Fernández, uno de los defensores de Colonia Dignidad, donde el liberalismo extremo permite que haya un grupo de líderes que rijan la vida de otros y que estos últimos estén dispuestos a ser esclavos, al igual que en la trama del popular filme 50 sombras de Grey, donde las parejas de Grey mediante un contrato liberal entregaban su libertad.

Volvamos a la memoria histórica, recordemos que Sergio Fernández Larraín fue uno de los impulsores de la Ley de Defensa Permanente de la Democracia de 1948, donde se protege la democracia que permite las ideas de la clase alta, posibilitando la represión a la izquierda.

Llevó el Estado de Emergencia al límite, al permitir la instalación del Campo de Concentración de Pisagua bajo los gobiernos de González Videla y de Carlos Ibáñez. Esta ley fue derogada en 1958 por la Ley de Seguridad del Estado, que continuó permitiendo la represión a los disidentes políticos; luego, en la dictadura de Pinochet esta ley fue perfeccionada y actualizada en 1975, y no ha tenido modificaciones hasta la fecha.

Sergio Fernández Larraín, por la rama de su madre Adela Larraín Hurtado, entrelaza con los Larraines mencionados a través de padre, abuelo y bisabuelo, etcétera, de ella: Ramón Larraín Cisternas, Agustín Larraín Rojas que llegan luego a Francisco de Borja Larraín Lecaros y a Santiago Larraín Vicuña, que son ancestros también de Bernedo Larraín Matte.

 

El cineasta Pablo Larraín Matte

 

La productora Fábula: el negocio audiovisual de la derecha liberal

Sin embargo, la transversalidad de Evópoli es insuperable: Pablo Larraín Matte, de Fábula, una productora apoyada inicialmente por el gobierno de la Nueva Mayoría, en combinación con ingresos que provienen de la publicidad que requiere la gran empresa, permitió una gran acumulación de contactos y de capital, luego prosiguió el apoyo del ministro de Cultura Cruz-Coke, del gobierno de Piñera, inalterable hasta nuestros días.

Sin embargo, cuando Pablo Larraín Matte dirige la película Neruda, que es la mirada de los Larraines acerca de los comunistas, del poeta, y de la Ley de Defensa Permanente de la Democracia de 1948, sabrá que su pariente Sergio Fernández Larraín, que es parte del Clan Larraín, es uno de los redactores de esa ley, quien inaugura el campo de concentración de Pisagua y que luego la dictadura de Pinochet reabre, y pone a cargo al teniente coronel Ramón Larraín Larraín, otro integrante del clan.

La insuperable actitud transversal de Pablo Larraín Matte y de Evópoli lo llevó a aportar $250 mil a la campaña de Boric en la primera vuelta (Fuente: La Segunda, 11 de noviembre 2021, página 7) nada contradictorio, porque para ellos Boric salvó a la clase dominante el 15 de noviembre de 2019, pero su programa presidencial actual no les gusta para nada.

El excandidato presidencial Briones, de Evópoli, se mantiene al margen de la campaña de Kast, no así: “en el último tramo de la campaña a la primera vuelta, el extitular de Hacienda se había activado apoyando en primera línea a Sichel” (Briones, La Tercera, 2021, diciembre, 9), criticó totalmente a Kast.

Bernardo Larraín Matte y Hernán Matte Larraín a través de Evópoli buscarán que el futuro presidente se enmarque dentro de un programa liberal represivo, que asuma las demandas ecofeministas que no alteran el poder de las castas, y que reprima a los jóvenes populares e indígenas mediante la aplicación de la Ley de Seguridad del Estado y del Estado de Emergencia, tal como se instaura actualmente en la Araucanía.

Evópoli ha decidido votar en segunda vuelta por Kast, aunque no ser parte de ese gobierno.

Su objetivo es evitar la llegada del Partido Comunista al gobierno, tal como lo sostuvo Sergio Fernández Larraín cuando redactó en 1948 la Ley de Defensa Permanente de la Democracia de 1948, como ya hemos visto, segmentos muy influyentes de Evópoli ya han tendido puentes con la candidatura de Boric, como el mencionado Pablo Larraín Matte, a fin de influir en que aplique la Ley de Seguridad del Estado para reprimir a los disidentes en un futuro cercano.

 

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Patricio Altamirano Arancibia realiza sus primeros estudios en el Instituto Nacional «General José Miguel Carrera», para luego ingresar a la carrera de sociología en la Universidad Arcis, donde se especializa en la investigación académica sobre la clase alta chilena.

Desde entonces, ha publicado y presentado diversos trabajos en congresos de sociología en el país y el extranjero, tales como: “La ruta de la modernización agraria chilena: capitalista, reaccionaria y extranjerizante”, “El capitalismo ilustrado del siglo XXI” y “Las ocho sombras de los mayorazgos modernos en el siglo XXI”, entre otros.

Durante el mes de septiembre de 2021 publicó la monografía La casta Larraín en la burguesía chilena (Ojo Editores).

Actualmente el autor realiza su doctorado en sociología, se desempeña como funcionario público y es el presidente vigente de la Asociación de los Trabajadores del Ministerio de la Cultura y de las Artes de la Región Metropolitana.

 

Patricio Altamirano Arancibia

 

 

Imagen destacada: Pablo Larraín Matte y Juan de Dios Larraín Matte.