[Entrevista] Escritora Espido Freire: «No existe ‘la mujer’, hoy en día, sino las mujeres»

Una de las narradoras españolas más destacadas de la escena artística internacional, dialogó con el Diario «Cine y Literatura» en el contexto de la reciente publicación de su último ensayo, bautizado «Tras los pasos de Jane Austen» (Ariel, 2021), y el cual ha contado con una entusiasta recepción por parte del público, de la academia y de la crítica especializada, en la península ibérica.

Por Eduardo Suárez Fernández-Miranda

Publicado el 27.7.2021

La escritora Espido Freire (Bilbao, 1974) acaba de finalizar unas jornadas de escritura autobiográfica organizadas por la Universidad del País Vasco.

Y antes de que iniciara un nuevo curso de extensión titulado «Escribir sobre la experiencia personal y contra el dolor», que se celebró en Teruel desde el 19 hasta el 21 de julio, es que hemos podido plantearle algunas preguntas sobre los libros que acaba de reeditar en su catálogo la editorial barcelonesa Ariel, perteneciente al prestigioso Grupo Planeta.

En esa lista de novedades resaltan especialmente la cercana publicación de la celebrada Tras los pasos de Jane Austen (2021), una ambiciosa monografía inspirada en la vida y en la bibliografía de la canónica creadora inglesa, y de las novelas Diabulus in musica (2020) y De la melancolía (2019).

Desde el sentimiento estético que expresa y la embarga a causa de la reedición de sus obras, y de las temáticas contemporáneas manifestadas por esos textos, sumadas a su admiración por el misticismo de Santa Teresa de Jesús, conversó la escritora con el Diario Cine y Literatura.

 

«Creo de manera absoluta en el poder liberador de la lectura»

—Toda reedición de un libro supone para el escritor la oportunidad de revisar lo que escribió años atrás. Parece ser que el pintor francés Pierre Bonnard solía retocar, a escondidas, algún fragmento de un cuadro suyo que llevaba años colgado en el museo. ¿Ha sentido la tentación de retocar alguno de sus libros aprovechando la reedición de parte de su obra?

—Sí, en mi caso no es una tentación sino una abierta declaración de intenciones. En casi todas mis obras reeditadas he incluido matices y correcciones, actualizaciones y creo que así debe ser, mientras la obra continúe viva.

Solo en una de ellas he realizado una revisión a fondo; en el resto, o bien las correcciones han sido puntuales o he optado por escribir un libro nuevo sobre el mismo tema.

 

En el ensayo Quería volar, habla de los trastornos alimenticios: la anorexia, la bulimia, la ortorexia o la vigorexia (quizás no tan conocidos), que afecta a la adolescencia pero también a las personas adultas. El libro es también un relato de su propia experiencia. D.H. Lawrence decía que “uno se libera de sus enfermedades vertiéndolas en los libros; vuelve a presentar y a experimentar sus sentimientos para así dominarlos”, ¿cree en ese poder liberador de la escritura?

—De manera absoluta en la lectura, y solo en según qué circunstancias en la escritura; en ocasiones se convierte en otro círculo vicioso, en la contemplación de la enfermedad y no en un camino de curación.

D.H. Lawrence reinterpretaba a través de la literatura de ficción ese concepto de enfermedad.

Cuando se habla de un ensayo, el testimonio claro debe primar en muchas ocasiones sobre lo literario. No obstante, si bien un libro como este puede ser el primer paso para las enfermas y sus familiares, nunca debería sustituir a la terapia y al tratamiento médico y psicológico.

Insisto todo lo que puedo en ello.

 

El misticismo de Santa Teresa de Jesús

—La figura de Santa Teresa es protagonista en su libro Para vos nací. Entre otros, trata el tema de la dificultad de ser mujer en un mundo de hombres. Como usted relata, Teresa de Cepeda “sabía que el poder se encontraba en manos de los hombres, y a ellos se dirigió, humilde, cuando fue necesario, insistente, y con un poder de seducción que nadie le negó nunca”. ¿Cuál cree que debe ser la actitud de la mujer de hoy en día para enfrentarse a esa desigualdad? ¿Cómo fue su acercamiento a Santa Teresa?

—Me gustaría tener una respuesta a la primera pregunta. Lo desconozco. Por otro lado, no existe “la mujer”, hoy en día, sino las mujeres.

Analizar lo femenino significa, por fin, hablar de individuos con circunstancias comunes pero no homogéneas. Lo que a mí me ha servido es posible que esté condicionado por mi situación como escritora, la visibilidad que he tenido desde hace más de 20 años y la ausencia de responsabilidades familiares.

Teresa de Jesús era una figura de referencia en mi familia, sobre todo por una de mis tías, Carmelita Descalza. Su biografía y su obra como escritora me era familiar desde pequeña.

Descubrí más tarde a la pensadora y a la mística, y me pareció deslumbrante.

 

La escritora Espido Freire

 

«Hay muchas relaciones disfuncionales entre adultos y ancianos»

—En Los malos de cuento habla de aquellos comportamientos dañinos y perjudiciales que afectan a las relaciones personales. ¿Es su libro una advertencia para las jóvenes generaciones?

—Es una advertencia para todas las generaciones: de hecho, hay muchas relaciones disfuncionales entre adultos y ancianos, negadísimas e integradas. En los jóvenes quizás les sirva de referencia respecto a amores y amistades.

En los mayores las relaciones conflictivas se desplazan muchas veces hacia lo laboral y sobre todo hacia la familia, o creada, o política, o de origen.

 

—El índice de Primer amor, es un catálogo de cuentos infantiles: Cenicienta, La bella durmiente o La sirenita. ¿Qué le atrae de estos cuentos, hasta el punto querer recrearlos en su libro?

—En realidad no los recreo, sino que los analizo y extraigo de ello las enseñanzas que transmitían, más allá de la obsesión por lo amoroso de las interpretaciones actuales.

Es un libro que lleva veinte años de andadura, que ha sido copiado y parafraseado hasta la exageración, lo cual me lleva a pensar que di con una clave importante; en los cuentos se encuentra, libre de costumbrismo, gran parte de los mensajes esenciales que han sobrevivido generaciones casi sin cambios: por eso son tan interesantes y es tan polémico el que se modifiquen, aunque sea mínimamente.

 

La «Orgullo y prejuicio» interpretada por Keira Knightley

—A los lectores de la revista les interesa la literatura, pero también el cine. En su último libro, Tras los pasos de Jane Austen hay una sección titulada “Jane Austen audiovisual”, donde se repasan las adaptaciones al cine y a la televisión de las novelas de la escritora inglesa. ¿Cuál cree que es la que mejor se ha adaptado al espíritu de Austen?

—Otra pregunta complicada… porque somos hijos de nuestro tiempo, y esclavos de nuestras emociones…

Es posible que el Orgullo y prejuicio interpretado por Keira Knightley sea una fiel versión, con la ventaja de interpretar muy bien las sutilidades irónicas y de captar la juventud y los errores de sus protagonistas.

Me gusta mucho también la Lady Susan (Amor y amistad) de 2016 con Kate Beckinsale, una obra menor interpretada con mimo y con esa perversidad que luego no encontramos en otras novelas de Jane.

 

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Eduardo Suárez Fernández-Miranda es licenciado en Derecho de la Universidad de Sevilla (España).

 

«Tras los pasos de Jane Austen», de Espido Freire (Ariel, 2021)

 

 

 

Eduardo Suárez Fernández-Miranda

 

 

Crédito de la imagen destacada: Eduardo Garrido.