Este montaje dramático -presentado por la temporada 2018 del GAM-, es la muestra de un «teatro-circense» vivo, cercano, reflexivo, y con una propuesta que lúdicamente ahonda en cuestiones profundas sin caer en la teorización erudita ni menos en la comicidad burda.

Por Jessenia Chamorro Salas

Publicado el 27.5.2018

La pregunta por la existencia del ser humano no es solo un tema que ha ocupado a los filósofos de todos los tiempos, es un cuestionamiento que también ha inquietado a psicólogos, escritores, historiadores, artistas y dramaturgos. ¿Qué hace al ser humano “ser-humano”? resulta una pregunta capciosa o incluso retórica, debido a que la respuesta nunca es unívoca, por el contrario, parecería tener múltiples respuestas derivadas de una laberíntica reflexión cuya salida es especulativa.

El montaje en cuestión se presenta como un intento no definido ni definitorio que pretende tantear las diversas dimensiones que podrían dar forma a la existencia humana, a través de una multisensorialidad que se enmarca dentro de una “experiencia teatral”, así el público se convierte en parte de la búsqueda sin respuestas acerca de la significancia de lo “humano”, por medio de un recorrido lúdico, centrípeto, circense, multimodal y reflexivo que se presenta como un paseo experiencial que reúne distintas manifestaciones artísticas en una convergencia que apunta hacia la pregunta central: ¿Qué hace al ser humano “ser-humano”? ¿Será caminar? ¿bailar? ¿comunicarse? ¿dibujar? ¿escribir? ¿moverse? ¿construir? ¿pensar? ¿amar? … o ¿todo a la vez?

La propuesta de Especulaciones sobre lo humano apunta hacia esto último no solo estética sino también filosóficamente, lo cual queda de manifiesto en las diversas disciplinas que se ponen en juego en la escena que busca representar el escenario de un circo-teatro, en donde los espectadores no están sentados en butacas o asientos, sino en galerías circulares, posicionamiento que permite no solo ver a los actores y su despliegue escénico, sino que también ver a los otros espectadores asombrarse y participar atentos del mismo espectáculo que vemos nosotros.

Las compañías de teatro Circo Hechizo y Circo Virtual se unen esta vez para construir un acontecimiento que involucra al espectador en el proceso mismo de elaboración, haciéndolo partícipe del “destejido” (Diéguez Ileana) que generó la obra: una exposición con archivos, documentos, dibujos, arpilleras, una máquina de escribir y diversos papeles en donde cualquier persona del público puede registrar ideas, pensamientos y reflexiones en torno a las sensaciones que le produce el montaje, sirven de preludio al acto teatral central, en donde se combinan rutinas circenses, efectos sonoros en vivo, retroproyectores con acetatos móviles y en permanente construcción, efectos artesanales de animación, y movimientos corporales, entre otros, componen diversas figuraciones sobre lo humano, ahondando en la capacidad humana de poder desdoblarse, crear, construir, y desplegarse no solo por el escenario, sino que asimismo a través de distintas plataformas y medios, los cuales cuestionan, entre otras cosas, el automatismo en el que cae el ser-humano, la (in) comunicación, y el relato sobre la capacidad infinita del Hombre por desarrollar/se.

Especulaciones sobre lo humano recuerda en parte a la propuesta estético-teatral de Ana Correa y de la compañía Yuycahkani en su célebre obra La rebelión de los objetos, en donde se evidencia la importancia de los objetos y de las cosas no solo en su uso cotidiano, sino igualmente en las múltiples posibilidades que poseen en su dimensión performática. Ollas que se transforman en sombreros, en paletas, en piedras; chalecos que se transforman en seres imaginarios; mantas que son capas y muletas de torero; vasos que son recipientes de pelotas; entre otros, son los objetos con que interactúan los actores-personajes, demostrando la capacidad innovadora de “lo-humano” de “humanizar” y dotar de vitalidad a las cosas.

En otro sentido, el montaje Especulaciones sobre lo humano, tiene entre sus particularidades un profundo trabajo con el cuerpo de sus actores, lo que deviene de la veta circense y que genera una dramaturgia encarnada que tiene al cuerpo del actor como eje fundamental para el despliegue escénico. Cuerpo que se transforma en objeto, en máquina, en instrumento, o simplemente en materia maleable. Por ello es que la capacidad física y vocal tanto de los actores como de las actrices resulta destacable, pues requiere de un arduo manejo corporal tanto en los movimientos realizados, como en la concentración que deben tener, así como también en la sincronía vocal de los efectos sonoros y de las vocalizaciones realizadas.

Así, el relato que se teje en Especulaciones sobre lo humano es precisamente lo que su nombre indica, una variedad de elucubraciones sobre el amplio abanico semántico que implica ser-humano, especulaciones que se refieren no solo en términos dramatúrgicos, sino que también se materializan en la propuesta misma del espectáculo teatral, la cual combina movimiento, cuerpo, voz, dibujo, textura, sonido y música en una convergencia que mantiene tanto la percepción como la atención del espectador a cada instante, propiciando la relación entre los afectos y los efectos de éste.

Con la participación de la destacada dramaturga Ana Harcha en la dimensión textual de la obra y de Thomas Bentín en la asesoría coreográfica, Especulaciones… se convierte en un montaje ejemplificador del trabajo en equipo en donde cada elemento está en sintonía y sincronía con el otro, generando una partitura teatral cohesionada y uniforme en la diversidad estético-multimodal que proponen.

Especulaciones sobre lo humano, presentado esta temporada 2018 en el GAM, es la muestra de un teatro-circense vivo, cercano, reflexivo, y con una propuesta que lúdicamente ahonda en cuestiones profundas sin caer en la teorización erudita ni menos en la comicidad burda.

«Especulaciones sobre lo humano» se presenta como un intento artístico que pretende tantear las diversas dimensiones que podrían dar forma a la existencia humana, a través de una multisensorialidad que se enmarca dentro de una “experiencia teatral” y corporal

Ficha técnica

Elenco: Juan Pablo Corvalán, Ana Harcha, Camila Barrales, Magdalena Pacheco, Tomás Kaulen
Diseño espacial: Tomás Kaulen, Juan Pablo Corvalán
Diseño escenográfico, de iluminación y de aparatos: Alejandro Castillo
Diseño de vestuario: Tatiana Pimentel
Composición musical: Magdalena Pacheco
Asesor musical: Cristóbal Carvajal
Asesor coreográfico: Thomas Bentin
Técnico en sonido y control en vivo: Francisco López
Encargado de mediación y audiencia: Juan Pablo Corvalán y equipo especulador
Ilustraciones y dibujo en vivo: Camila Barrales
Diseño gráfico, audiovisual y fotografía: Alejandro Délano
Producción: Daniela Moraga, Circo Virtual, Circo Hechizo
Comunicaciones: Lorena Alvarez Chávez
Acompañamiento dramatúrgico y textos: Ana Harcha
Asesora actividades especuladoras: Katharina Eitner
Operadora de luces: Daniela Leiva
Dirección: Tomás Kaulen y Juan Pablo Corvalan

Funciones y horario: Desde el 18 de mayo hasta el 10 de junio de 2018, viernes a domingo, a las 19:00 horas.

Sala: Edificio B, piso 2, Sala N2 del GAM

Para mayores de 7 años
Duración: 90 minutos

La propuesta artística de esta obra contempla un aforo para 60 personas en gradería de circo.

Valor de las entradas: $ 5.000 general, $ 3.000 estudiantes y tercera edad

Dirección: Avenida Libertador Bernardo O’Higgins Nº 227, Santiago Centro, Santiago

Crédito de las fotografías utilizadas: Centro Cultural Gabriela Mistral