En la primera novela de la escritora española (publicada originalmente en 2013) un grupo de estudiantes de teatro de la Universidad de Granada preparan un espectáculo escénico con el cual ironizan sobre un presente incómodo y frente al que no están de acuerdo.

Por Martín Parra Olave

Publicado el 28.10.2020

En esta, su primera novela, Cristina Morales (Granada, 1985) nos avisa sobre lo que va a ser su trabajo posterior y podría considerarse el semillero desde donde nacen las ideas que recorren la obra con la cual ganó el prestigioso Premio Herralde de Novela 2018, Lectura fácil.

En Los combatientes (Editorial Anagrama, 2020, y publicada originalmente en 2013) un grupo de estudiantes de teatro de la Universidad de Granada montan un espectáculo con el cual ironizan sobre un presente incómodo y frente al que no están de acuerdo: es su hostilidad ante un estado de las cosas que les perturba, sin ir más lejos.

Es la actitud propia de una juventud que se rebela frente a las fuerzas políticas que hegemonizan toda la sociedad: «Porque no nos gusta el disimulo, ponernos un nombre que nos distinguiera, que nos individualizara frente a la institución gracias a la cual existíamos nos parecía de niñatos rebeldes que se hacen un piercing a escondidas pero luego piden dinero para ir al cine».

Es decir, su apuesta es mucho más profunda que solamente vociferar eslóganes de rebeldía desde la comodidad. La obra de Morales no solamente quiere mover el piso, sino que más bien desea hacerlo desaparecer, para que quienes estamos sobre él sintamos el vértigo de la caída libre.

Vivimos en una sociedad compleja, que ha generado beneficios solamente a algunos, y por otro lado, que ha establecido fuertes dependencias entre individuos, hombres y mujeres, que no logran darse cuenta que su estabilidad es una forma engañosa de mantener esa adicción enferma del sistema.

En la obra de Morales, los personajes que transitan por ciertos espacios de marginalidad son los encargados de poner en evidencia todas esas ataduras y desestructurar la fantasía de progreso y de bienestar, tan bien promocionada por la alianza político y económica de los dueños del capital.

Los jóvenes combatientes, que a través de su arte, intentan volcar su desprecio radical por la sociedad en la cual viven, se desenvuelven sin miedo a enfrentar el ridículo o el fracaso, pues pareciera que ellos mismos entienden que desde siempre han permanecido dentro de estas situaciones, por lo que hacerlas evidentes no les generaría costos adicionales.

Una obra diferente, plagada de humor, ironía y descontento, que de manera breve pero intensa, apuesta por descentrar al lector y llevarlo por caminos más bien oscuros, caminos críticos, caminos que de una u otra forma permitan ampliar la mirada del entorno que tenemos, y no aceptar de manera sumisa todo lo que nos llega de él.

La invitación de Morales, a través del  inclasificable Los combatientes, apunta a instalar la duda como una forma de existencia, una sospecha que nos haga mantener despierto un espíritu de rebeldía para de esa manera poder emanciparnos de la dictadura capitalista y patriarcal que nos domina.

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Martín Parra Olave es licenciado en gobierno y gestión pública de la Universidad de Chile y magíster en letras de la Pontificia Universidad Católica de Chile.

«Los combatientes», de Cristina Morales (Editorial Anagrama, 2020)

Martín Parra Olave

Imagen destacada: Europa Press.